Noto un silencio sepulcral; nadie me responde como si de un campo santo se tratara. ¿Qué ha pasado aquí? Es verdad que este rincón del mundo, nunca fue un rincón concurrido. Nada que ver con esas otras esquinas donde miles de voces irrumpen al mismo tiempo y se arma una algarabía monumental. Este rinconcito, otrora entrañable, siempre fue un remanso de paz, una calita de mar serena, de aguas transparentes y quietas, o bien parecía un altozano donde unos pinos inundaban el ambiente con su característico olor a resina y a piña, o quizás era esa huerta pequeña repleta de naranjos y limoneros y verduras tiernas y apetitosas… pero hoy no es ni eso, parece un erial, un desierto, un lugar del páramo agostado en verano o bien helado en invierno y azotado por fuertes vientos violentos.
¡Qué pena de El Cadejo Blanco!, abandonado a su suerte, desprotegido por sus anteriores dueños… ¿Por qué —me pregunto— no es entregado a alguien que quiera protegerlo, mimarlo, cuidarlo amorosamente, hacerlo crecer como se merece y atraer a las buenas gentes que antes lo habitaban? “¿Por qué me has abandonado, Padre?” dijo una vez la voz de un hombre bueno, y esa pregunta la hago yo también a los autores y creadores de este rincón ¿por qué habéis abandonado al Cadejo Blanco? ¿Qué razón, o sinrazón, podréis esgrimir para justificar lo injustificable?
Y yo, desde mi playa, allá por el Mediterráneo, alguna vez dirijo mi mirada a esta orilla y lamento su abandono; siento en mí profunda tristeza y grito con toda la fuerza de mis pulmones para que me podáis oír: ¡No dejéis que muera este Foro! pero si deseáis su muerte, matarlo ya de una vez; borrarlo del mapa, y que no esté arrastrando su inactividad.
El Postiguet, antiguo Garroferal. Desde la vieja Lucentum romana, hoy llamada Alacant, a 15 de febrero de 2013
-- Edited by GARROFERAL on Friday 15th of February 2013 02:24:05 PM
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