¿Quién de los dos fue más infiel?
Nunca me quedará muy claro.
La verdad es que la tarde se fue sórdida y fría,
cruel, si se quiere, porque tuvo un final.
Nunca debió pasar el fin, ahí en aquella cama de aquel motel (por demás barato),
quedaron mis energías sin lágrimas,
mis sudores sin vergüenza, mis tristezas sin límite,
mis preguntas de siempre...
¿Por qué te rendiste a mis mentiras?
¿Por qué el deseo de vivir una aventura cualquiera?
¿Por qué esta maldita manía de enamorarme?
Unos besos rutinarios, unos ojos cerrados,
unos labios abiertos, unas lenguas busconas...
Y la música de fondo y tus gemindos y mi morbo
y mi placer y mis movimientos y nuestra locura
y nuestros amores prohibidos gozando la locura del momento.
Por qué no morimos nosotros esa tarde
en vez de ser la tarde la que se despidiera...
No me explicaré nunca cómo llegué a tu casa la noche de ese día
y le dije a mi amigo que los casaría el sábado
(gracias por el café que me ofreciste,
viniendo de tus manos tuvo sabor a cielo)
pero te confieso que el beso que le diste
muy a pesar de todo, me hizo morir de celos.
HAPPY HALLOWEEN MARA DE ESTADOS UNIDOS, FELIZ DIA DE LOS MUERTOS Y TODOS LOS SANTOS EN EL SALVADOR