Hace unos días, y en otro Foro frecuentado mayormente por salvadoreños donde colaboraba, inserté el comentario que más abajo repito. Al ser un texto de mi cosecha creo que no cometo infracción alguna, y como he comprobado que hablando del amor hay un tema cerrado imposible de entrar en él, traigo éste, aunque aquí hablo del amor humano, sin connotaciones divinas, y trágico y turbulento como pocos. Se trata de una novela, pero que, como todas, en algún lugar del mundo, y por algunos seres humanos, se habrá vidido un hsitoria semejante.
¿Y si hablamos del amor llevado a sus últimas consecuencias?… *******
Pudiera ser el sentimiento del amor, el tema sobre el cual más se ha escrito en toda la literatura mundial y en todos los tiempos y lugares.
El amor es, sin duda, el sentimiento más universal, el que todo humano ha conocido en algún momento, el que más felicidad da y el que más hace sufrir. Y si por alguna casualidad de la vida hubiera alguien que por la puerta de su casa este sentimiento no ha pasado jamás, debe ser seguramente el ser más triste y desgraciado del universo.
El amor, por tanto, ha sido desarrollado por la inmensidad de los escritores, en todas formas e intensidades. Desde el amor romántico y a veces empalagoso, pasando por el mediocre, el intenso y el más turbulento. Aquel que genera toda clase de sentimientos adjuntos, incluso el odio y el deseo de exterminar a la persona querida.
He leído tanto que conozco toda clase de amores reflejados en la literatura, pero hay un amor que siempre me ha subyugado, y es el amor que Emily Brontë nos describe en su novela “Cumbres borrascosas”, una novela romántica pero descrita tan tumultuosamente que impresiona. Yo diría que la más tumultuosa de toda la literatura inglesa, tan proclive a esos amores desenfrenados.
Los páramos de Yorkshire, fríos, tristes, grises y nubosos, dan pie a este amor sobrecogedor entre Heathcliff y Catherine. Es una novela que me impresionó desde el primer momento. La primera vez que la leí hace ya unos veinte años o más, y desde entonces de vez en vez la vuelo a releer. Es una pasión —o varias pasiones entrelazadas— que solamente pueden ser comparadas con los fenómenos naturales de aquella zona inglesa, y solamente pueden darse en el seno de una familia, la morada de Earnshaw, cuyos indómitos hijos parecen ser hijos de las tempestades.
Alguien dijo que bien se podía comparar a Emily Brontë con el Shakespeare del “Rey Lear”, y a mi modesto entender no le faltó razón.
Amigos, supongo que la novela la conoceréis, una obra que, además, fue llevada al cine, pero en caso contrario leerla, os fascinará como a mí me fascinó y me aún me fascina.
Cumbres Borrascosas siempre me impresionó, yo vi la película cuando estaba bien chavo, quedó plantada en mi mente algunas escenas fuertes en las que presentaban dos mujeres acariciándose y besándose en los labios.
Las escenas fueron demasiado fuertes e inesperada para un adolescente con monumetales prejuic ios hacia el homosexualismo y el bisexualismo.
La edad, el estudio y mi visión amplia del mundo (Yo personalmente he estado en la bella ciudad de York en Inglaterra), han traído otra percepción de la evolución humana, de manera que voy a volver a ver la película en forma de video (prque nunca voy al cine, y dudo que vaya a leer el libro), para ver cuánto ha varíado mi percepción de la novela de Emily Bronte a esta alturas del partido.
Gracias por traer el tópico a colación Garroferal!
__________________
HAPPY HALLOWEEN MARA DE ESTADOS UNIDOS, FELIZ DIA DE LOS MUERTOS Y TODOS LOS SANTOS EN EL SALVADOR
Estimado Fredy, la novela de la que tratamos la he leído en varias ocasiones, la película creo haberla visto en cine en un sola, y, aunque en estos momentos no estoy seguro al cien por cien, diría que la tengo en DVD. Lo que ya no tengo claro es si se ha llevado a la pantalla en más de una ocasión, y le comento esto último porque no recuerdo esa escena sexual de la que usted me habla.
La trama de la novela no da pie a una escena homosexual, aunque a veces el cine, con tal de tener mayor asistencia a sus proyecciones, o sea, tener mayores beneficios en definitiva, tergiversa las obras novelísticas añadiendo escenas morbosas con ese fin crematístico, de ahí que una novela que me impacte por su trama, por su narrativa, por su calidad literaria, no me apetezca verla en el celuloide, por esta razón que le digo.
Me expresa usted la duda de que pueda alguna vez leer el libro; no sé sus razones, si es que no es amante de la lectura, si es por trabajo u otra razón; pero yo le aconsejaría que la leyera. Esa escena que tanto le impactó —probablemente de manera negativa— se le disipará, la obra es una obra de amor, un amor intenso, fuera de lo normal, pero es que el amor humano a veces lo es, sobre todo cuando nace en personas turbulentas y poco dadas a la reflexión.
Buscaré entre mis DVD’s esa película, la visionaré y le daré una respuesta más certera, porque como le he comentado anteriormente, esa escena no la tengo presente, y es más, llegaría a jurar que en la novela no se da por parte alguna, salvo que, por su juventud en aquel tiempo, usted le diera un interpretación errónea. Pero sea como fuere, lo importante es que si gusta de la lectura vea de adquirir la novela. Vale la pena leerla.
Leyendo a fondo este post, se me antoja leer la mencionada novela. He oído hablar de la película, mi esposo en algún tiempo la disfrutó y habla muy bien de ella. Me dedicaré a buscar el libro.
Por otro lado, realmente el amor tiene diferentes grados, pero considero que cuando llega al límite de querer exterminar al ser amado, deja ya de serlo y se convierte en cualquier otra cosa nefasta. Ya he escuchado esas sentencias que suenan a pedradas en el oído y en el corazón "si no eres mía, no serás de nadie más!"
Cuando el amor aviva la ilusión y las ganas de vivir, cuando pone luminosidad en los ojos y en la faz de las personas, cuando lo que el otro haga sea de nuestra importancia, ese es el amor de verdad, cuando sobreponemos nuestro bienestar en beneficio de alguien más, por que ese mero hecho, nos hace felices...
Ahhh! El amor....
__________________
Si no encuentras tu media naranja, toma tu medio limón agrégale azúcar, aguardiente, hielo y a disfrutar de la vida.
Estimado Fredy, la novela de la que tratamos la he leído en varias ocasiones, la película creo haberla visto en cine en un sola, y, aunque en estos momentos no estoy seguro al cien por cien, diría que la tengo en DVD. Lo que ya no tengo claro es si se ha llevado a la pantalla en más de una ocasión, y le comento esto último porque no recuerdo esa escena sexual de la que usted me habla.
La trama de la novela no da pie a una escena homosexual, aunque a veces el cine, con tal de tener mayor asistencia a sus proyecciones, o sea, tener mayores beneficios en definitiva, tergiversa las obras novelísticas añadiendo escenas morbosas con ese fin crematístico, de ahí que una novela que me impacte por su trama, por su narrativa, por su calidad literaria, no me apetezca verla en el celuloide, por esta razón que le digo.
Me expresa usted la duda de que pueda alguna vez leer el libro; no sé sus razones, si es que no es amante de la lectura, si es por trabajo u otra razón; pero yo le aconsejaría que la leyera. Esa escena que tanto le impactó —probablemente de manera negativa— se le disipará, la obra es una obra de amor, un amor intenso, fuera de lo normal, pero es que el amor humano a veces lo es, sobre todo cuando nace en personas turbulentas y poco dadas a la reflexión.
Garroferal
Don Garro, acabo de advertir algo muy importante:
He hablado de la película Amores Borrascosos, ahí fue donde vi la escena en mención, con mi comentario andaba más perdido que una cabra en Manhattan.
En efecto, la falta de tiempo no me hace leer un libro formal por estos días, sin considerarme "amante de la lectura", sí me encanta leer, leo de absolutamente todo lo que cae en mis manos, como Cervantes, hasta los papeles que por casualidad en cuentro por las calles; en literatura prefiero los clásico sobre lo moderno, Victor Hugo mi non plus ultra.
__________________
HAPPY HALLOWEEN MARA DE ESTADOS UNIDOS, FELIZ DIA DE LOS MUERTOS Y TODOS LOS SANTOS EN EL SALVADOR
He hablado de la película Amores Borrascosos, ahí fue donde vi la escena en mención, con mi comentario andaba más perdido que una cabra en Manhattan.
En efecto, la falta de tiempo no me hace leer un libro formal por estos días, sin considerarme "amante de la lectura", sí me encanta leer, leo de absolutamente todo lo que cae en mis manos, como Cervantes, hasta los papeles que por casualidad en cuentro por las calles; en literatura prefiero los clásico sobre lo moderno, Victor Hugo mi non plus ultra.
Ciertamente me quedé perplejo al saber de esa acción de la película la cual nunca aprecié, como tampoco la detecté en la novela que varias veces he leído. Ahora al comprobar el error por la similitud de los títulos queda aclarado.
De todas formas, amigo Fredy, la cosa no tiene importancia.